
Le pedimos a todos nuestros lectores que no caigan en la treta de este grupo autollamado “los fiesteros de navidad”, que con el verso de que están parados bajo un muérdago, ya se han picoteado a más de una docena de muchachos ingenuos.
Así que si por casualidad se encuentra esperando un colectivo, tomando un café en un bar o montando un barrilete, y un señor se le acerca y le dice “comeme la boca que hay un muérdago arriba” y observa que hay otro señor parado con cara de “solo pasé por acá” sujetando una rama sobre su cabeza, grite pidiendo ayuda a la policía o dígales muy cortésmente que se siente alagado pero es ateo y no cree en esas cosas, y a continuación retírese del lugar rápidamente.
Gracias por escucharnos, y tengan cuidados en estas fiestas… ya que hay muchos locos sueltos.
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