
Según el detenido, no tenía nada contra Chacarita, y agregó que solo eligieron ese club porque era el más cercano a su hogar, la cual esta ubicada a tres cuadras de la cancha y a dos y seis de sus secuaces.
También confesó que las pelotas solo las robaban para regalársela a los chicos del barrio, ya que sostenía que el mejor fútbol es el de la calle y las placitas.
Además nos dijo el procedimiento para sacar las pelotas del club, “era muy fácil, solo teníamos que entrar un pote de miel, y cuando caía una pelota cerca de nosotros la tomábamos, la untábamos, la colocábamos en nuestra cabeza y las abejas hacían el resto”
Al preguntarle como metían el frasco a la cancha el detenido guardó silencio y se le escapó un lagrimón.
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aclaración: la foto pertenece a un perito de la policía que demostró como es que nadie se daba cuenta que los detenidos robaban las pelotas.
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