224.El Perro de CORONA

Perro –Por Dios!!!... si sos vos, la boluda con las tetas de lujo… que haces por acá?
Jelinek –Ay… mi mamá me dijo que no hable con desconocidos… además no soy tan boluda, yo se que vos sos un perro, y los perros no hablan.
Perro –Pero mamí, si yo soy un loro barranquero vestido de perro, no ves que es una fiesta de disfraces?... o me vas a decir que vos andas así por la calle?
Jelinek –Ahhh…. Los loritos si hablan, y me caíste bien… porque mi mamá tenía una cotorra que quería mucho.
Perro –Pero nena!!!… yo creía que la que tenía flor de cotorra eras vos.
Jelinek –No, mi mamá.
Perro –Decime una cosa nena… se estudia para ser tan pajera o es de nacimiento?
Jelinek –La verdad que yo no estudie nada, pero lo dejo a tu criterio.
Perro –No mamita, si ya me doy cuenta que lo tuyo es talento natural.
Jelinek –Gracias… a mi me encantan los loritos porque cuentan cuentos.
Perro –Mirá bebe, no se quien carajo te dijo que los loros cuentan cuentos, pero ya que me diste el pie, vamos uno y uno.
Jelinek –Esa la se, uno y uno es dos.
Perro –A la mierda, vos sos aventajada y por varios cuerpos… dale contá un chiste.
Jelinek –A ver si se uno?… mmm… que difícil… tendrías que haberme dicho con tiempo y me preparaba… mmm… ah… si… que le dijo una copa de árbol a otra?
Perro –Uhhh… negra, ese chiste es de jardín… pero no te pongas mal… no te voy a cagar el remate… a ver que le dijo?
Jelinek –Ahhh como era?... hablaste tanto que se me olvido… ahora lo dejo a tu criterio.
Perro –Brindemos, boluda, Brindemos!!!
Jelinek –No… le decía brindemos solo… nunca le dijo boluda.
Perro –Pero es peor que un opa en primavera… igual me voy a tirar uno que no vas a entender ni a palo pero que mis fans van a paladear con el alma… entra una vieja chota a un almacén y dice “disculpe señor, a cuanto tiene los huevos?” y el almacenero la mira y le responde “a 2 dedos del orto, vieja puta”… juajuajua… ese almacenero es de los mios… juajuajua.
Jelinek –Ahh… pero como va a guardar los huevos ahí?... si mi mamá me dijo que hay que guardarlos en un lugar fresco.
Perro –Bueno dejá… ni vale la pena explicar… yo me voy a la mierda.
Jelinek –Pero si todavía no rompieron la piñata.
Perro –Al final no se si es pelotuda o lo hace para pasarla bien… juajuajua… “al final la vida sigue igual… Ey”… juajuajua… Simultáneamente!

Sepan disculpar al perro, pero no respeta ni a los discapacitados mentales.